-Te trajimos aquí porque mi hermana Athenedora y yo encontramos un libro donde mencionaban enfermedades de híbridos que comienzan a partir de los 6 años de vida, le conté a Aro y el me dijo que tu cumplirías 6 en un mes, me preocupe y le suplique que te trajera para que supiéramos si tu tendrías esas enfermedades ya que solo se presentan en ciertos hibridos, tengo la esperanza de que tu no padezcas ninguna.-Ella me tomo las manos y me abrazo fuertemente.-Si no te gustan las agujas dímelo ahora, cuando atravieses al puerta no habrá marcha atrás.
-¿Qué?-Desde niña he odiado las agujas, mi abuela siempre me sacaba sangre y cuando cumple 2 años ya me habían picado muchas veces, cada vez que veía una aguja gritaba, pataleaba y en los últimos días maldecía.
-¿Le temes a la agujas?-Pregunto dulce y comprensiva.
-Tranquila solo sentirás un pellizco y después nada sin importar cuanto te piquemos.-Dijo una chica pasando junto a mí y abriendo la puerta, era la típica vampiresa, alta, esbelta, buen cuerpo y cabello largo y sedoso, aunque sus ojos eran raros de un color grisáceo.
-Créele ella nunca miente por más que lo intente.
-Claro que puedo…me…men… ¡no puedo!-Grito frustrada y me hizo pasar a la sala. Parecía un mini hospital, varios vampiros con batas blancas y cubre bocas iban de un lado a otro.-Lo hacen porque hueles a perro, no tienen problema al convivir con sangre.
-Sulpicia ve con Aro, dile que las pruebas van a comenzar.-Sulpicia corrió por un pasillo desapareciendo rápidamente.
-Tú te quedas aquí.-Dijo la vampiresa deteniendo a Alec con una mano en el pecho.-Va salir viva, tranquilo, regresa en 30 minutos.-Alec resignado y enojado se fue.- Acuéstate aquí.-Me dirigió a una camilla y me ayudo a subir.- No me presente soy Angélica.-Me tendió la mano y yo la estreche, en ese momento sentí un leve pellizcó, un vampiro se dirigió a otro lado con mi sangre en una jeringa.
-Soy Renesmmee, pero todos me dicen Ness o Nessi…
-Es un placer conocerte y estar contigo durante el proceso de pruebas.
{…}
Angélica sufriría las consecuencias, nadie me corre sin pagar. Nadie me da órdenes y yo las obedezco si no son los líderes.
Además en este momento podían estarse comiendo a Renesmmee…corrí de vuelta a la sala, cuando estuve cerca de la puerta oí aquella melodiosa voz, la voz que me atrapo cuando la oí en el bosque…creo que ella empezaba a gus…NO Alec, eso no puede ser ella es una Cullen y debes tratarla como tal.
Corrí, su olor había inundado el pasillo que conducía a mi habitación, a la sala de pruebas, ya todo olía a ella, algo en su olor era diferente a los demás, no era por ser hibrida, era algo más, algo más fuerte, algo que me hacía desear probarla pero al mismo tiempo que estuviera eternamente conmigo, que aquella sangre nunca se extinguiera…
Alec basta, detente ahora, si alguien sabe sobre tus conflictos mentales te podrían matar o matarla a ella…no, no lo permitiría, cuando la vi en brazos de su madre fue como si ella ahora fuera mi existir, la razón por la cual yo daría la vida, al verla me arrepentí de haber ido a matarla…ahora, al verla después de 5 años, todo había cambiado, comenzando por quien la acompañaba, el apestoso lobo la abraza, ese estúpido la beso, la beso demostrando que ella era suya, pero ya no, era estaba aquí, aquí podría enamorarla, podría hacer que ella acepte estar conmigo y no con ese perro, sería difícil pero Alec Vulturi nunca se da por vencido…
Me levante del techo del castillo y entre, ya habían pasado los 30 minutos, tengo que regresar por Ness y llevarla a su habitación, a partir de hoy comienza la cuenta regresiva en su conquista.
